jueves, 10 de enero de 2008

amanecer surrealista



El último día de mis vacaciones me levanté temprano, me calcé las ojotas, la cámara y salí a caminar a un morro que me había cautivado el día anterior. Me cautivó a la tarde -me gusta más la luz a la tarde, el día ya está gastado y tiene la carga emocinal de miles de pies que recorrieron el lugar- pero tuve que ir a la mañana -cuando el sol recién ilumina el lugar y el día está fresco- por cuestiones de comodidad. De ahí esta foto, un amanecer surrealista. No hay fotomontaje.